UNA MEDIDA DE SEGURIDAD CUANDO ES FACILMENTE IMITABLE DEJA DE SER EFICAZ.
En esto creo que todos estamos de acuerdo, pero lo más peligroso es cuando se mantiene esa medida de seguridad. Tomemos el ejemplo de las fibrillas luminiscentes. Estas fibrillas se imitan fácilmente con rotuladores cargados con tinta luminiscente que se adquieren con mucha facilidad en el comercio.
¿Qué sucede cuando un cajero pasa el documento,cheque, billete, DNI, por la lampara UVA.? Pues que viendo que tiene fibrillas lo da por válido.
Otro tanto pasa con la franja de tinta roja luminiscente que protege determinadas zonas de los cheques. También es fácilmente imitable y lo que es peor, su permanencia en el documento es muy limitada ya que se deteriora, llegando a desaparece, con la exposición a la luz.
Aquí pasan dos efectos: uno que al ver la franja luminiscente se da por válido el documento. Otra que un documento autentico se de por falso al tener muy debilitada la respuesta de esa tinta.
Pues bien, a pesar de ello y del riesgo que entraña todavía se sigue pidiendo a los impresores de seguridad que pongan fibrillas y franja de tinta roja luminscente.
La labor de los Laboratorios de Análisis documentales de las citadas empresas desarrollan investigaciones sobre las nuevas técnicas de falsificación y sobre los mejores sistemas de protección documental. Por ello son los indicados para asesorar sobre qué medidas son eficaces y cuales deben ser retiradas por ser fácilmente imitables.
Antes, pues de encargar la elaboración de un documento de seguridad debería realizarse una consultoría sobre qué medidas son adecuadas, teniendo en cuenta la importancia del documento, su trascendencia legal o financiera, su uso, su difusión, etc.